Capítulo 9 

Después de dos horas eternas, nos entregaron los resultados de las pruebas. Los único que entendimos de todo lo que nos dijo el medico es que Clara ya estaba bien y que la darían el alta en esa misma mañana. Llamamos a casa para que nos viniesen a buscar, ya que Zayn se había llevado el coche y seguramente estuviera durmiendo; el pobre estaría muerto de estar toda la noche despierto. 

Cuando por fin salimos de ese horrible hospital y llegamos a mi casa, había algunas maletas en la entrada.

- ¿De quién son estas maletas? -dijo Clara.

- No sé -dije un poco desconcertada.

- Çhicas, las maletas son por que nos vamos esta tarde.-dijo Cris triste.

- Os lo íbamos a decir ayer, pero como te pusiste así, Clara...-dijo Alba 

- Joder, no quiero que os vayáis.. - dije con los ojos llorosos.

Alba vio que yo estaba apunto de llorar y me abrazó, pasamos al salón y estaban todos sentados. Clara entró llorando de felicidad y abrazó a todos/as de uno en uno, ya que la habíamos contado María y yo cuanto se habían preocupado por ella, y sobre todo Zayn, a quien le dio el abrazo más largo, y desde mi punto de vista, más apasionado. 

- ¡Clara! ¿Que te a dicho el médico? - le preguntó Louis.

- Que no tenía nada grave y que ya me podría ir - dijo ella sonriendo.

- ¿Te han tenido en el hospital toda la noche para eso? -dijo Liam.

- Bueno, me han dicho muchas cosas, eran recomendaciones para que no me volviera a pasar y cosas así -dijo Clara riéndose.

- Pues muy mal Clara, tenías que haber escuchado lo que te ha dicho el médico para estar bien, no quiero que me vuelvas a dar un susto así. Quiero decir... Que nos vuelvas... -dijo Zayn, mientras veíamos como se sonrojaba sin para de reír, a lo que nos unimos todos.

- Muchas gracias por todo lo que has hecho por mí, de verdad, que eres increíble. No se si algún día podré agradecértelo como te merece -dijo Clara después de reírse y sonrojarse igual que él.

Todos los demás nos mirábamos, mientras ellos dos se sonreían como tontos. Parecía que fuesen a besarse de un momento a otro.

Después de uno más de estos momentos inolvidables, las chicas se levantaron de los sofás y se fueron a la habitación para dejar todo preparado para partir. María, Clara y yo nos quedamos con los chicos, estuvimos hablando un buen rato.

Las tres nos pusimos a hablar en español, sobre unos tatuajes que María se quería hacer, unos en la muñeca y otro en la cadera, pero no queríamos que se enteraran los chicos porque iba a ser una sorpresa, sobre todo para Niall. Ellos se nos quedaron mirando con cara extraña, y como nos nos entendían se pusieron a hablar entre ellos. 

Nos entró hambre, ya que no pudimos comer en el hospital. En la cocina teníamos muchos ingrediente, así que decidimos hacer una paella. Los chicos intentaban pasar a la cocina para saber lo que estábamos haciendo entre las tres, pero nosotras queríamos sorprenderles con una comida española. 

Mientras lo preparábamos hablábamos de la beca que habíamos solicitado para estudiar en Oxford, y oímos bajar a las chicas. Las ofrecimos pasar con nosotras a la cocina y nos dijeron que ya tenían todo listo, con caras largas.

- Sería genial que nos dieran la beca -dije. 

- Sí, ojalá nos cojan, así estaremos mucho mas cerca de los chicos. -dijo María entusiasmada mirando a las demás.

- ¿Cuándo nos mandarán las cartas diciendo si nos aceptan o no? -pregunté

- Creo que a mediados de agosto. -dijo María.

- Joder, todavía queda un mes. -dijo Clara ansiosa.

- Pues aunque no me den la beca yo me voy -dije 

- Sí, claro, ¿y dónde vas a vivir, y a estudiar? -preguntó María 

- Viviré en casa de Harry -dije riéndome 

Todas se pusieron a reírse, de lo que no puede evitar contagiarme.

- De las ilusiones se viven ¿no? -logré decir.

- Ya verás como todo sale bien, nos cogen y estaremos cerca de ellos. No me preguntéis por que, pero estoy segura de ello. - dijo Clara mirando a la puerta, pensativa.  

La paella olía increíblemente bien, y tenía una pinta perfecta. En el momento en el que íbamos a salir de la cocina, Niall entro como un toro y dijo: "chicas me muero de habré ¿queda mucho?". Justo después se quedó mirando a la paella como si se la comiera con los ojos y dijo relamiéndose: "adelante, adelante, yo pongo la mesa" y fue a por los cubiertos mientras nosotras no parábamos de reírnos a carcajadas y dejábamos la gigantesca paella en la mesa.

Nos la terminamos en menos tiempo del que creíamos, y llegó el momento que nadie quería que llegase: Isa, Cris, Bego, Estela y Alba tenían que irse a sus respectivos lugares de estudio.

La despedida en la puerta de mi casa fue horrible, no parábamos de llorar, no queríamos separarnos de nuevo. 

Tardamos muchos en despedirlas, dándolas muchos besos y abrazos. Los chicos las abrazaban y las deseaban mucha suerte, esta claro que saben como tratar a una chica y saben hacer buenas amigas. 

Al final montaron en el taxi que las esperaba, y todos vimos cómo se alejaba en esa bonita pero amarga tarde de verano.

Después de la despedida, los chicos se quedaron un rato con nosotras, antes de que llegaran los paparazzis.

- ¿Qué hace un hombre en mi jardín? -dije riéndome 

- Puede ser...¿un ladrón? -dijo Liam con ironía 

-¿Un ladrón con cámara de fotos?-dijo Harry 

- Es un paparazzi, tontos - dijo María

- Ya vienen a joder, madre mía... - dijo Clara 

- Yo creo que nos deberíamos ir, así no os molestan, chicas - dijo Zayn 

- O a lo mejor podemos esperar a que se vayan - dijo Niall juntándose a María y abrazándola

- Venga enamorado, vámonos, que ellas no tienen ninguna culpa. - le dijo Louis riéndose y tirándole del brazo.

Cuando se fueron, unos cuantos paparazzis les seguían y tres se quedaron en el jardín. Corrimos las cortinas para que no nos vieran ni nos sacasen fotos y preparamos unos cuantos aperitivos para cuando los chicos volvieran de su 'paseo'.

Nos quedamos solas el resto de la tarde y nos pusimos a escuchar música. Cuando al fin nos dejaron en paz, nos metimos en la piscina.

Estuvimos hablando de lo increíble, irreal y maravilloso que era todo esto, de que aún no nos creíamos que todo esto fuera verdad, de lo seguras que estábamos de ser Directioners hasta la muerte, de la cercana llegada de Eleanor y Danielle, lo que seguro que iba a ser una gran sorpresa para Lou y Liam, de lo que sentíamos por ellos... De miles de cosas en torno a One Direction, en resumen, cosas que tan solo podíamos hablar cuando estábamos solas y seguras de que ellos no oirían nada.

Después de esta charla, nos pusimos a nadar un rato y encendimos las luces de la piscina; ya estaba anocheciendo, pero cuando estaban encendidas, daba igual la hora que fuese, se veía perfectamente.

Eran eso de las diez de la noche cuando llegaron los chicos.

- Menos mal que habéis llegado, ya nos teníais preocupadas -dijo María

- Es verdad, ¿dónde habéis estado?- dijo Clara con alivio

- Lo sentimos chicas, no conseguíamos despistarles -dijo Niall

- ¿Pero al final lo conseguísteis? - pregunté

- Sí, nos metimos en los baños del Starbucks donde nos llevásteis hace un tiempo - respondió Zayn sonriendo mientras empezaba a quitarse la camiseta

- ¿Ahora te vas a meter?- dijo Harry

- Sí, meteros todos si queréis - dijo Zayn

- Muy bien - ésta fue la contestación de Harry justo antes de quitarse la ropa.

Al meterse fue a hacerme una aguadilla, de la cual me pareció la cosa más perfecta del universo.

Se metieron al agua los cinco. Harry y yo tuvimos una pelea en la cual me sentí tan feliz que no puedo casi explicarlo: no paraba de decirme cosas como 'vas a morir, pequeña' mientras me hacía aguadillas y nos reíamos sin parar. Una de las veces, me encontré sentada sobre sus hombros casi con un ataque de risa. Cuando dejamos de 'pelear' fuimos hacia los demás y estuvimos un buen rato relajándonos todos juntos, fue fantástico.

Sobre las once nos fuimos a duchar, suerte que tenía tres baños, y alrededor de las doces ya estábamos todos durmiendo.

Por la mañana María nos despertó a Clara y a mí.

- ¿Qué pasa? -dijimos Clara y yo a coro.

- Chicas, yo hoy quiero ir a hacerme los tatuajes, ¿cómo nos escapamos de los chicos?

- Pues podríamos decirles que tenemos que ir a visitar a familiares. -dijo Clara 

- ¿Y si se quieren venir con nosotras? - dijo María 

- Les decimos que se van a aburrir porque vamos a hablar en español y no iban a entender nada.-dije

- Bueno, le diremos eso. - dijeron Clara y María

Bajamos a la cocina y hicimos un desayunos americano. Al terminar de hacerlo lo subimos a la habitación de los chicos. Estaban despierto todos menos Niall y Louis. María fue a despertar a Niall, y lo hizo con un besos apasionado, y a Louis le despertamos haciéndole cosquillas. 

Durante el desayuno estuvimos hablando.

- Chicos, nosotras ahora nos tenemos que ir -dijo Clara

- ¿Dónde? - preguntó Louis.

- Eh... vamos a ir a ver a un amigo y a unos familiares. -dijo María

- ¿Qué amigo? - dijo Niall 

- Un amigo nuestro de la infancia. - contestó María

- ¿Qué es esto, un interrogatorio? - dije

- Bueno, bueno, nosotros iremos a seguir conociendo Madrid. - dijo Harry

Terminamos de desayunar, nos vestimos y los chicos salieron para el centro de la cuidad y nosotras para las afueras. 

Mientras María se hacia el tatuaje, Clara y yo hablábamos de lo que seria vivir en Inglaterra. Clara y María desde pequeña soñaban con vivir en UK, un sueño que tenía muchas posibilidades de que se hiciera realidad. 

Después de una hora, terminaron de hacerle los tatuajes a María. Nos los enseñó y eran preciosos, en el de la muñeca ponía el símbolo de las Directioners, y en el de la cadera ponía Niall. 

Cuando terminó de enseñárnoslos, insistió en que nos hiciéramos uno nosotras, pero ninguna de las dos quisimos.

Nos fuimos caminando hasta la casa, estábamos ansiosas por hablar con las chicas. Cuando llegamos fuimos corriendo las tres a por el teléfono, María fue la que lo cogió, marco rápido el numero de Eleanor, y lo puso en altavoz.

*conversación telefónica*

- ¡Hola Eleanor! -dijimos las tres a la vez 

- Hola, chicas ¿qué tal?

- Muy bien ¿y tú?

- Muy bien

- ¿Que día pueden venir aquí a España?

- Pues podría ser dentro de cuatro días ¿os perece bien?

- Perfecto, ¿cuando ya tengas la reserva de los pasajes nos podrías llamar y nos pasas todos los datos?

- Claro, yo os llamo y os comentó todo.

- Genial, muchas gracias por prestarnos tu tiempo.

- No hay de que, gracias vosotras por gran idea.

*fin de la llamada telefónica*

Empezamos a dar saltos, estábamos histéricas. Esperábamos ansiosas a que pasaran ya los cuatro días.

Cuando nos tranquilizamos un poco, nos pusimos a tomar sol. 

- Chicas, yo voy a comer una ensalada ¿vosotras queréis? -dijo Clara.

- Vale -dije

- Yo quiero pero sin cebolla -dijo María 

- Tía, ya empiezas a sacar cosas ¿cuando te vas a comer la ensalada completa?-dije jodiendola

Me echó una mirada amenazante, pero terminó haciéndome burla.

Después de comernos las ensaladas seguimos tomando sol y Clara se metió en la piscina. 

- ¿Están llamando? -dije

- Sí. ya lo cojo yo -dijo María mientras corría hacia el teléfono.

Clara y yo intentábamos escuchar lo que decía María pero apenas se oía. 

María seguía hablando con las chicas cuando tocaron el timbre. Fui a abrir la puerta y ahí estaban los 5 chicos más maravillosos.

- ¡Hola chicos!

- Hola, Belu - dijeron sonriéndome

- ¡Chicos! -dije sorprendida.

- ¿Si? -dijeron 

- Pasad al jardín.-dije un poco nerviosa.- Clara entreténlos. - la dije en español

Fui a decirle a María que estaban los chicos, que se diera prisa para que no escucharan nada de nuestro plan con Eleanor y Danielle, pero cuando entre en la cocina estaba junto con Niall. Me dirigía a mi habitación, cuando me cogieron Niall y María y me llevaron a la piscina tirándome en ella. 

- ¡Cabrones! -dije mientras les sacaba la lengua 

Todos se empezaron a reír. 

Al terminar de reírse se pusieron en un corro y empezaron a cantar canciones. 

- Chicos, tengo que enseñaros una cosa, sobre todo a ti, Niall. - dijo María muy ilusionada

- ¿Y qué es esa cosa? - preguntaron todos a la vez.

María, apartó las pulseras de su muñeca dejando ver uno de los tatuajes. Todos se quedaron mirándolo embobados.

- ¿Qué? ¿No vais a decir nada? - dijo Clara riéndose

- Estamos sin palabras, es increíble - dijo Liam

- Y... Mira, Niall - dijo María mientras subía su camiseta para mostrarle el otro tatuaje.

Niall, se quedó más embobado aún mientras estiraba su mano para tocarlo. Pero María dio un pequeño paso hacia atrás porque todavía le dolía.

Niall se acercó a María y la susurró 'Me encanta...', y antes de que terminara la frase, María le interrumpió con un dulce beso.

Después de ver los tatuajes de María, Harry se levantó y se metió conmigo, y nos pusimos a hablar. 

- ¿Quieres salir a tomar algo esta noche? -me dijo mientras me miraba fijamente.

- Vale, pero ¿nosotros dos solos?

- Sí, no creo que quieran salir los demás. -dijo muy convencido.

María me empezó a hacer señas, que no entendía lo que quería decir. Harry vio que no le prestaba mucha atención, y me cogió de la mano. Mi primera reacción fue un pequeño susto que hizo que apartara mi mano de la suya.

Después de seguir hablando con Harry, decidimos salir de la piscina, y nos sentamos junto a los demás. 

María me seguía haciendo señas, que seguía sin entender. Así que al final se acercó a mí y me llevo hasta la casa del jardín.

- ¡Belen tía! - dijo seriamente

- ¿Qué pasa? ¿Qué significa todas las señas esas? 

- Pues que Niall me ha preguntado que si quiero ir a dar una paseo con él. -dijo muy ilusionada.

- Pues perfecto, ¿no? - dije sonriéndola

- Sí, pero me da vergüenza estar a solas con él. - dijo cabizbaja 

- María, tía, es tu novio, ¿cómo te va a dar vergüenza? - la pregunté

- No sé, ¿y si la cago? 

- ¿Cómo la vas a cagar? Anda, deja de decir tonterías.

Alguien interrumpió la conversación, tocando la puerta. Cuando vi que un chico moreno de pelo rizado asomaba su cabeza por la puerta, una sonrisa ocupaba mi rostro. 

- Chicas, Zayn y Liam van a cocinar ¿queréis algo en especial?

- Yo no voy a comer, no tengo hambre -dije 

- A mí me da igual, mientras no sea algo raro -dijo María riéndose

Asintió con la cabeza mientras se reía y se fue hacia la cocina.

-María, no pienses más, no creo que te vaya a pasar algo malo. Niall es una persona dulce y adorable y te quiero mucho. -dije un poco seria.- ahora vamos os con los demás.

Nos fuimos caminando, María se quedó en el jardín junto a Clara, Niall, Harry y Louis, y yo fui a ayudar a los chicos a cocinar.

Estaban cocinando pasta. Cuando terminaron de cocinar, no lo querían probar por si acaso no le había salido muy bien y llamaron a Niall para que lo probase. Por la cara que puso estaba bueno así que nos sentamos a comer, y la comida tuvo tanto éxito que se lo comieron todo.

-¿Qué van a hacer esta noche? -preguntó Louis. 

- No sé, seguramente saldremos. -dijo Clara.

Después de recoger la mesa yo me fui a cambiar. Al bajar me encontré con Liam, que ni cuenta se dio de que yo me había arreglado. 

- Liam, ¿has visto a Harry?-dije 

- Sí, esta en el salón. -dijo 

Fui hasta el salón y Harry estaba intentado convencer a Zayn y Louis para que no nos acompañasen, pero Louis estaba empeñado con que teníamos que ir todos juntos. Harry se dio la vuelta, y sus ojos se iluminaron al verme. 

- Belu, ¿queréis ir vosotros dos solos? ¿No preferís ir todos juntos? -dijo Louis.

- ¿Tengo que ser yo la que decida? -dije 

- Sí - contestó Louis riéndose.

Clara venia hacia nostros, y dijo: 

- Chicos, ¿y si nos vamos todos al pub que fuimos la otra vez?

- Bueno, vale... -dijo Harry 

Al decir eso hizo que yo le mirara rápidamente y me dijo al oído.

- No pasa nada, otro día iremos los dos solos. 

Al oír esto me decepcioné un poco, pero a la vez me alegré porque al fin y al cabo otro día estaríamos él y yo solos.

Nos fuimos a buscar a Niall y María que estaban en la habitación.

- María, Niall, nosotros nos vamos a ir al pub ¿queréis venir? -dijo Clara.

- No, nosotros nos vamos a dar un paseo. - dijo Niall.

- Tened cuidado con lo que hacéis, parejita - dijo Belén.

- No vamos a hacer nada, idiota - me dijo María con cara amenazante.

Todos nos pusimos a reír y fuimos a arreglarnos para ir ya al pub.

*Narra María*

Por fin todos se fueron al pub y nos dejaron a Niall y a mí a solos.

Niall bajó al salón y yo me quedé en la habitación vistiéndome. Me puse lo primero que pillé en el armario y bajé rápido con él para que no tuviera que esperar mucho.

Al verme se levanto del sofá y fue a besarme.

- ¡Que mono eres! -dije después del dulce beso 

Me cogió de la mano, salimos de la casa y nos dirigimos al Retiro.

En el camino se nos acercaron algunas fans a pedir algunos autógrafos y a hacerse alguna foto con él. También nos persiguieron algunos paparazzis, nos hacían muchas preguntas, pero nosotros lo único que hicimos fue sonreirles sin contestar a nada.

- Ya hace un poco de frío, ¿quieres que vayamos a mi hotel, que está aquí al lado? - me preguntó Niall sin parar de sonreír.
- Vale. - le contesté mientras frotaba mis brazos para intentar calentarme un poco.

Cuando vio que me estaba frotando los brazos porque tenía frío, pasó su brazo por mi hombro e hizo que me juntara más a él para intentar calentarme un poco.

Tardamos uno cuantos minutos en llegar al hotel. Cuando por fin llegamos, me quedé asombrada al ver el hotel, era gigante.

- Es enorme. - dije sin parar de mirarlo

Niall me miró y se rió.

- Pues ya verás la habitación. - dijo mientras pasábamos a dentro

Llegamos a la habitación y era super grande, estaba alucinada con ese hotel, nunca había oído hablar de él.

Recorrí toda la habitación, observando cada cosa que había, hasta que me senté en la cama.

Niall se acercó a mí y se sentó a mi lado. Comenzó a besarme suavemente. 

Pude notar como sus manos se deslizaban lentamente por mi espalda hasta llegar a mi cintura, como agarraba mi camiseta y la subía hacia arriba para quitármela. Yo hice lo mismo con la suya.

Vi que llevaba sus manos a mi pantalón para quitármelo también, pero yo le aparté rápidamente.

- ¡No Niall, para, por favor! - le grité muy alterada

- ¿Qué pasa? ¿Eres virgen? - me preguntó un poco asustado

- No, no es eso... Perdí al virginidad con mi ex novio, pero no fue una buena idea.

- ¿Por qué? ¿Qué pasó?

- Él insistía en que lo hiciéramos, y yo no quería, pero al final tuve que aceptar porque me amenazó con cortar conmigo y yo no quería que eso sucediera porque le amaba. A los tres días de hacerlo, rompió conmigo y se reía de mí con sus amigos. Me hizo la vida imposible durante unos años. Desde ese día, no lo he vuelto a hacer con nadie porque tengo miedo a que me vuelvan a hacer lo mismo. - le conté mientras algunas lágrimas recorrían mi cara.

Noté como se enfadaba, no le gustó escuchar lo que le conté, no le gustó saber que alguien me hizo daño.

- Tranquila cariño, yo nunca te haré eso, lo prometo, y hasta que tú no estés preparada para hacerlo, no haremos nada. - me dijo un poco más tranquilo mientras me abrazaba. - ¿Quieres quedarte a dormir?

- Vale, pero no tengo pijama ni nada. - dije mientras me secaba las lágrimas

- No importa, te dejo uno mío. - dijo mientras me lo daba.

Lo cogí y me fui al baño a cambiarme.

- Me queda enorme, Niall - dije riéndome

- No, te queda perfecto. - dijo mientras me sonreía

Nos tumbamos en la cama y estuvimos un rato hablando, hasta que se nos hizo tarde y apagamos la luz.

Yo no podía dormir, no tenía nada de sueño. Niall ya estaba dormido, y yo me puse a observarle, parecía mentira que estuviese allí con él, todavía no podía creerme que yo fuera su novia.

Me tumbé en su pecho y al fin pude dormirme escuchando los latidos de su corazón.